«Jugadores»: el histórico canto que volvió a la tribuna de River

River Plate Godoy Cruz

River dio vergüenza nuevamente en la Liga Profesional del fútbol argentino tras perder ante Godoy Cruz, luego de haber comenzado ganando el partido gracias al gol de Miguel Borja, uno de los pocos futbolistas a la altura de las circunstancias en este fatídico presente que transita el equipo dirigido por el aprendiz Martín Demichelis.

El Millonario nunca pudo mostrarse superior al conjunto mendocino, salvo en algunos esporádicos pasajes del primer tiempo. El Tomba no había ganado en el torneo local hasta el momento, pero se llevó la victoria finalmente y dejó en evidencia por enésima vez las falencias de River en todo sentido.

Ante este panorama, mientras los minutos pasaban y no se vislumbraba una vuelta de timón, los pocos hinchas que pudieron asistir al estadio Malvinas Argentinas expresaron su descontento con una típica canción de cancha que no se escuchaba desde hacía ya muchos años. El himno nacional del verdadero futbolero volvió a sonar.

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Jugadores la concha de su madre

«Jugadores la concha de su madre, a ver si ponen huevos que no juegan con nadie» se escuchó con fuerza aproximadamente al minuto 30 del segundo tiempo, cuando el elenco local estaba más cerca de conseguir el tercer gol que el visitante de empatar el match. Todo lo contrario a lo que sucede en las tribunas del estadio Monumental.

Cuando el Más Grande juega en su casa, los simpatizantes adictos al sushi aplauden cualquier jugada, cualquier decisión y cualquier resultado. Por supuesto que no son todos tan subnormales, pero la gran mayoría sí. Lamentablemente, esta falta de exigencia genera que River tenga que convivir con un presente poco alentador y un futuro oscuro.

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Insultos de la gente de River a Demichelis

Al concluir el encuentro, los hinchas no perdonaron al entrenador del Millonario, que se fue silbado y abucheado de la cancha. En el Monumental es algo que pasa muy poquitas veces y sólo cuando lo nombran por el altoparlante, pero la parcialidad se divide entre quienes lo bancan y quienes no. Insólito.

El mes que viene comenzará la fase eliminatoria de la Copa Libertadores de América, el máximo objetivo del año, y no hay ninguna luz de esperanza que alumbre el camino. A este paso se avecina otra eliminación dolorosa, dado que no hay mejorías en ningún ámbito. Realmente preocupante.

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Para competir seriamente hay que traer refuerzos de verdadera jerarquía y no apuestas, cambiar totalmente el cuerpo técnico, y prescindir de los jugadores que se creen intocables y están desde hace años dando lástima con el Manto Sagrado puesto. Sin embargo, con una dirigencia anti-River es prácticamente imposible nivelar para arriba. Desastre.

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