La reciente expulsión de Enzo Pérez durante el partido de River contra Estudiantes ha desatado una ola de críticas y discusiones entre hinchas y analistas del fútbol argentino. El mediocampista, que regresó al equipo de Marcelo Gallardo en este mercado de pases, vio la tarjeta roja en un momento crucial del encuentro.
Cuando el Millonario perdía por la mínima, aún con chances de empatar el partido, el volante central dejó a su equipo en desventaja numérica. Esto terminó afectando el resultado final, ya que el Pincha volvió a convertir sobre el cierre del match para sentenciar el 0-2 definitivo. Un despropósito totalmente cuestionable.
Esta situación provocó un debate sobre la consistencia de las decisiones arbitrales en la Liga Profesional, especialmente en partidos de alta tensión. Pero más discutible es el desempeño del mendocino desde que retornó a la institución de Núñez, dado que no ha estado a la altura de la exigencia del Manto Sagrado en lo que va del semestre.
La frase picante de Ruggeri contra Pérez
La reacción de los hinchas no se hizo esperar. Muchos expresaron su descontento fuera del estadio y en redes sociales, y a esto se le sumó la participación de distintos comentaristas deportivos. Uno de ellos fue Oscar Ruggeri, reconocido exfutbolista que ganó todo con la camiseta de River en una época repleta de gloria bajo el mando del Bambino Veira.
El Cabezón, como se le conoce popularmente, no tuvo pelos en la lengua al opinar sobre el rendimiento del actual ‘5’ del Millonario. «Es complicado jugar con un volante central de 40 años, así no se puede», expresó de manera contundente el ahora panelista de ESPN, siguiendo la línea de muchos hinchas que opinan lo mismo.
«Es demasiado viejo para un puesto que es clave. Tipos como él son los que te regulan el equipo para abajo y para arriba», continuó el otrora defensor que obtuvo la Copa Libertadores y la Copa Intercontinental en 1986. Es palabra autorizada para dialogar sobre esta clase de sucesos, porque conoce muy bien lo que acontece en el campo de juego.
«Es complicado jugar con 40 años. Con 30 te lo pedía con los ojos cerrados, pero ahora ya no le da», finalizó Ruggeri. La presión sobre el plantel aumenta, ya que cada partido es crucial para mantener las aspiraciones en el torneo doméstico. La dirección técnica tendrá que trabajar en la estrategia y en la motivación del equipo para afrontar los desafíos que se avecinan.