El regreso de los hinchas visitantes a las tribunas está siendo una de las grandes noticias de este Torneo Clausura. Después de años de estadios vacíos o con público limitado, se empieza a vislumbrar un ambiente más parecido al de antes. Pero no todo es alegría, y en el Monumental se encendieron las alarmas con una fuerte protesta de los socios.
¿Qué está pasando en Núñez?
La Asociación del Fútbol Argentino abrió la puerta a que los clubes puedan recibir hinchas visitantes, siempre y cuando cuenten con la aprobación de las autoridades provinciales y de seguridad. Algunos ya se sumaron a la iniciativa, como Lanús, que recibió a rivales en su estadio. Sin embargo, en River la situación es diferente. La directiva, por el momento, ha decidido no habilitar la entrada a las parcialidades contrarias, argumentando que el estadio ya está completo con sus socios, abonados y demás miembros.
La capacidad del Monumental, que supera los 85000 espectadores en cada partido, es un factor clave en esta decisión. Sin embargo, esta postura no ha sido bien recibida por una parte importante de la hinchada, que considera que la prohibición de visitantes va en contra de la esencia del fútbol. Ante este panorama, la gente tomó una determinación que acaparó todos los medios.
Carteles que hablan por sí solos
En las horas previas al partido contra San Lorenzo, que terminó igualado 0-0 tras un chato desempeño del equipo que dirige Marcelo Gallardo, las calles del Barrio River se llenaron de afiches con mensajes contundentes. Los carteles, firmados por “socios e hinchas de River Plate”, expresan el hartazgo de una parte de la hinchada que pregona el regreso de los visitantes al estadio más convocante del mundo.
“Queremos ir y recibir visitantes, respeten a los hinchas. Dirigentes antifútbol. Los socios e hinchas de River Plate”, se lee en uno de ellos. El otro, aún más directo, dice: “Si quieren espectadores, vayan al cine. El fútbol es de los hinchas. Que vuelvan los visitantes”. Estas expresiones reflejan el deseo de vivir el fútbol como antes, con la pasión y el colorido que aportan los hinchas visitantes.
¿Una grieta en el mundo River?
La protesta de los hinchas de River plantea un debate importante sobre el futuro de las hinchadas en el fútbol argentino. ¿Es posible conciliar la seguridad con la pasión? ¿Debe primar la comodidad de los socios por sobre la experiencia de los visitantes? La dirigencia se encuentra ante un dilema. Por un lado, debe garantizar la seguridad de sus hinchas y cumplir con las regulaciones. Por otro, debe escuchar las demandas de una parte importante de su comunidad, que anhela revivir los clásicos con la atmósfera vibrante de las tribunas llenas de rivales.
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