Maximiliano Salas volvió a ser tema candente en los foros de la hinchada tras su brillante arranque en el plantel, y la expectativa por su presencia en la próxima fase de la Copa Libertadores no ha dejado de crecer. Cada entrenamiento, cada charla de prensa alimenta la ilusión de verlo nuevamente en acción, y los seguidores ya imaginan los goles que podría aportar contra Libertad en el Monumental.
Sin embargo, la semana pasada surgieron rumores sobre su estado físico, y la prensa deportiva no tardó en indagar sobre la verdadera magnitud de su lesión. En ESPN se confirmó que el jugador sigue bajo observación médica y que el cuerpo técnico prefiere no apresurar su regreso, así que será poco probable contar con él para el partido de vuelta de los octavos de final.
La lesión y el diagnóstico
El 27 de julio, durante el enfrentamiento contra San Lorenzo, Salas abandonó el campo con una molestia evidente. Los estudios realizados al día siguiente revelaron un esguince distal del ligamento colateral medial en su rodilla izquierda, una afección que, aunque no es catastrófica, requiere tiempo y cuidados específicos. A pesar de que se anticipaba una pronta alta médica, la realidad muestra que la lesión aún limita su rendimiento y genera dudas sobre su disponibilidad inmediata.
La postura de gallardo y el riesgo de apurarlo
Marcelo gallardo ha sido enfático en no precipitar la recuperación de su delantero. Durante la práctica del martes, el cuerpo técnico admitió que Salas todavía no se siente al 100 % y que no existe la intención de forzar su retorno. El entrenador prefiere preservar la integridad del jugador, evitando el riesgo de agravar la lesión, y ha puesto en pausa cualquier intento de incluirlo en la lista de convocados para la revancha contra el conjunto paraguayo.
¿Podrá Salas salir al frente contra Libertad?
Considerando la información disponible y la cautela del técnico, la respuesta se inclina hacia un no definitivo para la próxima fecha de la Libertadores. Salas parece estar más fuera que dentro de la planificación para el partido de vuelta, lo que implica casi un mes sin actividad competitiva. De hecho, el objetivo del cuerpo técnico es que su regreso se produzca en el próximo encuentro del Torneo Clausura contra Lanús, donde podrá testear su estado sin la presión de un partido continental.
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